Robert Pattinson y Kristen Stewart viven uno de sus mejores momentos tanto en su carrera artística, como en su vida personal.
No hay duda de que esta pareja ha llegado a tener tanta fama que a ellos mismos les ha de sorprender.
A Kristen y a Robert, la fama les ha traído el dolor de cabeza de ser acosados por la prensa y los fotógrafos en cada lugar al que asisten, pero como siempre pasa, también les ha traído muchas cosas buenas, como el cariño de sus fans, el reconocimiento de sus compañeros a su excelente trabajo y a su calidad humana, y también, una cuenta en el banco de muchos ceros.
Esta famosa pareja se puede dar el nivel de vida que quiera, tienen todo para hacerlo: su fama les abre muchas puertas, su dinero puede pagar lujosos coches, restaurantes, hoteles, aviones, joyas, ropa de los mejores diseñadores, en fin, lo que se les antoje. Se sabe que Rob compró una mansión de seis millones de dólares--y qué bueno que lo haya hecho; pero además de eso, Robert y Kristen son amigos de la vida sencilla.
Sin embargo, ellos mantienen un bajo perfil; sus salidas a restaurantes son como las de la mayoría de las parejas: no acostumbran derrochar en diversiones, más bien les gusta pasar buenos ratos con sus amigos más cercanos, su estilo de vestir sigue siendo informal, no cambian la comodidad por la elegancia.
Como prueba de ello está la reciente fotografía que se acaba de dar a conocer en la que la pareja está celebrando el cumpleaños de un amigo, la fiesta es en la casa del amigo, no hay lujos y Robert Pattinson y Kristen Stewart visten con su habitual estilo desenfadado, t–shirts blancas y ella unos shorts de mezclilla cortos.
Qué bueno que esta famosa pareja tiene los pies en la tierra y no se deja llevar por el momento de gloria que vive en el presente, sin duda han sido muy inteligentes al mantener un bajo perfil en su vida pública.
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